"El botón para las armas nucleares está sobre mi escritorio", amenaza Kim Jong Un en su discurso de Año Nuevo

El gobernante de Corea del Norte, Kim Jong Un, afirmó este lunes en un discurso de Año Nuevo transmitido por la televisión estatal que Estados Unidos debería estar consciente de que las fuerzas nucleares del país asiático son ya una realidad, no una amenaza.
Corea del Norte ha logrado la hazaña histórica de “completar sus fuerzas atómicas", afirmó Jong Un en su discurso de Año Nuevo. "Estados Unidos debería saber que el botón para las armas nucleares está sobre mi escritorio”, declaró, según una traducción provisional de The Associated Press.
"Logramos la meta de completar nuestra fuerza nuclear estatal en 2017", dijo Kim, quien recalcó la necesidad de "producir en masa cabezas nucleares y misiles balísticos y acelerar su despliegue".
Kim aseguró que la capacidad atómica de su país ejerce un gran poder disuasorio en Estados Unidos, al que aseguró que sus armas son capaces de golpear en todo su territorio.
"Esto es una realidad, no una amenaza", añadió.
El gobernante norcoreano instó a Washington y Seúl a poner fin a sus maniobras conjuntas, criticadas por el régimen al considerarlas un ensayo de invasión a su país, y tendió una mano al país vecino afirmando que Norte y Sur deben mejorar sus relaciones.
Inclusive, sugirió por primera vez que su país podría participar en los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en la ciudad surcoreana de Pyeongchang, entre el 9 y el 25 de febrero.
"Espero sinceramente que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang se realizarán con éxito", declaró Kim. "Estamos dispuestos a tomar las medidas necesarias, incluido el envío de nuestra delegación" a esos Juegos, añadió.
Corea del Norte intensificó sus pruebas armamentísticas el año pasado con el lanzamiento de una veintena de proyectiles, tres de ellos intercontinentales, y la realización de su sexta y más potente prueba nuclear hasta la fecha el pasado septiembre.
Sus repetidas pruebas le han valido al país asiático un número récord de resoluciones sancionadoras de la ONU en un año, cuatro, a pesar de lo cuál Pyongyang sigue apostando por su desarrollo de armas, con las que dice buscan un equilibrio de fuerza con EEUU.
A esta férrea postura se sumó el pasado año el tono amenazando con el que el presidente estadounidense Donald Trump ha respondido a los actos de Pyongyang, una beligerancia que ha llevado la tensión en la península a niveles no vistos en décadas.